«El impacto de los productos asiáticos en el tianguis de San Martín Texmelucan: Preocupación por la competencia desleal»
El tianguis de San Martín Texmelucan, en la comunidad de San Lucas Atoyatenco, considerado el más grande de Latinoamérica, enfrenta una creciente incursión de productos asiáticos en su oferta. Durante un recorrido por sus pasillos, se observó una variada gama de artículos provenientes de Asia, tanto al mayoreo como al menudeo, incluyendo bisutería, perfumes y artículos de temporada. Esta situación ha generado preocupación entre los comerciantes locales.
Aunque en el sector de la ropa no predominan las marcas asiáticas, ya se encuentran productos importados, destacando la presencia de una comercializadora en pleno corazón del tianguis. Este establecimiento, ubicado cerca de la central camionera, ofrece una amplia variedad de artículos, como termos, papelería, maquillaje, perfumería y utensilios de cocina. Con un tamaño superior al de los locales tradicionales, esta importadora se ha convertido en un punto de distribución clave para el sureste mexicano.
Elim Garzón Contreras, líder del Círculo de Organizaciones Populares (COP), expresó su preocupación por la competencia desleal que representan estos productos asiáticos. “Aunque son productos de baja calidad, su bajo precio afecta a la economía de los comerciantes, que en su mayoría son productores y fabricantes”, señaló. Garzón advirtió que muchas familias dependen de la venta de productos nacionales y que la disminución de ventas podría llevar al cierre de talleres, o incluso a que los productores locales se vean obligados a revender mercancías asiáticas, lo que perjudicaría aún más sus ingresos.
José Galindo Yamak, dirigente de la organización Josefa Ortiz de Domínguez, explicó que en su área más del 60 % de los comerciantes son productores de ropa, mientras que alrededor del 30 % son revendedores. Aunque el 1 % de los agremiados comercializa prendas de Asia, los pantalones de mezclilla son los productos más solicitados, seguidos de camisas, ropa de mujer y, en menor medida, chamarras y sudaderas.
En las más de veinte organizaciones que conforman el tianguis, se han identificado pequeños puestos que venden juguetes, luces y artículos de temporada, muchos de los cuales provienen de Asia y están ganando popularidad entre los compradores. Los lunes, día de mayor actividad, más de cien autobuses llegan desde estados como Veracruz, Oaxaca, Chiapas y Tabasco, así como de entidades cercanas como Tlaxcala, Hidalgo y el Estado de México. Esto convierte al tianguis en un centro neurálgico de distribución, amplificando el impacto de los productos asiáticos en la región.
La creciente presencia de productos asiáticos plantea un desafío para los comerciantes y productores mexicanos. Aunque muchos consumidores optan por estos artículos debido a su bajo costo, la calidad inferior de los mismos podría afectar la percepción a largo plazo. Además, la competencia desleal generada por la importación masiva podría tener repercusiones graves en la economía familiar y regional.
Los líderes de las organizaciones de comerciantes coinciden en que esta situación amenaza no solo a los vendedores del tianguis, sino también a la producción nacional. Ante ello, llaman a fortalecer el consumo de productos locales como una medida para preservar el empleo y la economía de miles de familias mexicanas.